miércoles, 27 de junio de 2012

jueves, 21 de junio de 2012

Reseñas de "Cartas a los estudiantes de Ciencia Política"

Por si están interesados en leer lo que se ha publicado sobre el primer volumen:

1) Reseña de Mariana Magaldi de Sousa, en "Unidiversidad", número 5, septiembre-noviembre 2011.
2) De Israel Covarrubias, en "Metapolítica", número 76, enero-marzo 2012.
3) http://revistareplicante.com/el-estudio-de-la-ciencia-politica/

sábado, 16 de junio de 2012

Woldenberg y el fraude imposible


Por qué es imposible un fraude

José Woldenberg

Reforma, 14 de junio de 2012


Sí, un fraude; modificar, alterar, maquillar, los votos que se depositan en las urnas.
Para hacer fraude se pueden tomar varios caminos: trucar la lista de electores, colocar funcionarios de casilla facciosos, alterar el cómputo, manipular el material electoral.
Pues bien, ¿qué sucede entre nosotros? El padrón electoral y la lista nominal de electores son revisados por 333 comisiones de vigilancia en las que participan todos los partidos políticos. Se trata de 300 comisiones distritales, 32 estatales y una nacional. Tienen acceso a la base de datos y la posibilidad de realizar un seguimiento puntual de su elaboración. Además son instrumentos que se auditan una y otra vez y un comité técnico -con científicos de primer nivel- dictamina sobre ellos. El padrón y la lista fueron aprobados sin impugnaciones y cualquier ciudadano con credencial puede checar si aparece en él. La época de los rasurados (ciudadanos que eran cercenados alevosamente de la lista) y los fantasmas (ciudadanos inexistentes a los que se expedía credencial para votar) quedó atrás.
Las boletas son infalsificables. Se elaboran en papel seguridad que tiene fibras visibles e invisibles, sellos de agua, están foliadas, contienen el nombre del municipio en el cual deben usarse y son elaboradas en exclusiva por Talleres Gráficos de México. Son distribuidas por el IFE con el apoyo del Ejército y la Marina. Se trata, por supuesto, de evitar su falsificación y/o trasiego. Y ambas cosas se han logrado.
Las credenciales de elector están plagadas de elementos de seguridad que las hacen infalsificables. Cuando se han encontrado imitaciones no pasan la prueba del ojo y sobre todo no sirven para votar porque no aparecen en el listado nominal. A las credenciales se les marca una vez que el ciudadano vota, para evitar que vuelvan a ser utilizadas, y para impedir el doble voto -suponiendo que un ciudadano tuviera dos credenciales- se marca el dedo pulgar del elector con tinta indeleble. Además, para el momento de la votación existen mamparas con una cortinilla que permite la entrada de un solo votante, de tal suerte que incluso si fue presionado o coaccionado pueda emitir su voto en libertad, sin que nadie lo observe.
Los funcionarios de la casilla son ciudadanos residentes en la sección electoral que luego de un sorteo y de una somera capacitación actúan como presidentes, secretarios y escrutadores. No son funcionarios del IFE, sino ciudadanos que generosamente aceptan recibir y contar los votos de sus vecinos. Y ningún dedo todopoderoso los designa, sino que el azar -doble insaculación- y una rápida instrucción los habilita como las autoridades de la casilla. Es difícil pensar que puedan amafiarse para beneficiar o perjudicar a alguien, pero, por si las moscas, los partidos tienen el derecho de nombrar a sus propios representantes, que pueden observar todo el proceso desde la instalación hasta la clausura de la casilla, incluyendo por supuesto el conteo de los votos. No hay excusa para que los grandes partidos dejen de tener representantes en todas y cada una de las casillas.
Los votantes tienen que identificarse con su credencial y los representantes de los partidos cuentan con una copia de las listas nominales con fotografía para que chequen los datos del eventual elector y su rostro. Una vez que termina la votación, el cómputo lo hacen los funcionarios de casilla en presencia de los representantes de los partidos (e incluso de observadores registrados previamente en el IFE). Y los resultados son asentados en un acta, de la cual se da copia a todos y cada uno de los representantes de los partidos, y los resultados se despliegan fuera de la casilla para que los vecinos los puedan conocer.
El presidente de la casilla, acompañado por los representantes de los partidos (no vaya a ser que en el camino le entre la tentación del fraude), lleva los paquetes electorales y, por fuera de ellos, las actas del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), a uno de los 300 consejos distritales del IFE, desde donde, tal y como van llegando, se trasmite la información a un centro de cómputo en la Ciudad de México. Esa computadora está conectada directamente a internet para que cualquier persona, desde cualquier lugar del mundo, pueda observar cómo se van agregando los resultados no sólo a nivel nacional, sino también circunscripcional, estatal, distrital e incluso casilla por casilla (recuérdese que los partidos cuentan con las copias de las actas de escrutinio de las casillas y las pueden confrontar con los resultados del PREP).
Pero el PREP es sólo un sistema para informar la noche de la elección. El cómputo oficial inicia el miércoles siguiente en los consejos distritales, en donde se reúnen el presidente (único funcionario del IFE), seis consejeros ciudadanos y los representantes de los partidos.
Pueden producirse irregularidades en una casilla o en un conjunto de casillas. Pero un fraude maquinado centralmente es imposible.


sábado, 9 de junio de 2012

Lo dijo Alberto Moravia

"Curiosamente, los votantes no se sienten responsables por los gobiernos que han votado".

jueves, 7 de junio de 2012

Algo de lo que dije en 2006 sobre Calderón y López Obrador

En el artículo -que ratifico en relación con el momento en que surgió y del que habla- "Para votar" publicado el 30 de junio de 2006 en "Cambio":
Sobre el hoy presidente Felipe Calderón dije que: "(...) su ambición de poder lo ha hecho un buen candidato en campaña para una competencia tan cerrada como la que vivimos pero que también lo ha llevado a los dichos y hechos de la política que merecidamente criticó el PAN de forma histórica (fue así porque era oposición). Que ha propagado unas cuantas mentiras -nocivas por polarizantes- sobre el candidato perredista. Que ya no hay seguridad de que tenga las ´manos limpias´. Que es un conservador pero no un fascista que vaya a instaurar un gobierno de ultraderecha (...). Por último, que los empleos no se crean por decreto o a una mano (por muy limpia que esté)".
Sobre Andrés Manuel López Obrador: "hay que saber que no será el salvador de la patria ni será un peligro para México porque sólo sería un presidente en una democracia, es decir, un presidente sin control del Congreso, la Suprema Corte, el Banco de México y los medios. Que no es inocente ni insensato para comprar un enfrentamiento en los hechos con ´factores reales de poder´como los Estados Unidos, los organismos financieros internacionales y los empresarios (véase el caso Lula). En consecuencia, que, por un lado, no podría (ni quiere hacerlo en realidad) cambiar en sentido estricto el modelo económico con dominante de libre mercado [con un sentido de "entre comillas"...]: sólo generaría más (¿y mejores?) programas sociales federales dentro del marco general de dicho modelo; y, por otro, que no puede resucitar la ´presidencia imperial´ priista (que, por cierto, no hay un solo buen trabajo de Ciencia Política, al estilo de Jeffrey Weldon o Juan Espíndola Mata, que concluya que haya sido ´imperial´, si bien fue metaconstitucionalmente muy fuerte), como el intelectual en penosa decadencia Enrique Krauze teme. Que su gobierno en el DF no sirve para establecer su patrón de comportamiento en caso de ganar el gobierno federal, ya que los contextos difieren: en el DF, López Obrador actuaba en un escenario social, político y legislativo a modo y en la federación el escenario es y será diametralmente opuesto". 
Todo eso entre otras cosas...

lunes, 4 de junio de 2012

Otro resumen sobre el currículo político de Bartlett


Colaborador de los Secretarios de Gobernación durante el último tercio de la presidencia de Díaz Ordaz y todo el sexenio de Luis Echeverría. Coordinador General de la campaña presidencial de Miguel de la Madrid, cuando el más alto cargo se obtenía por el famoso “dedazo”. Secretario de Gobernación del presidente De la Madrid, a quien los obradoristas, salvo Bartlett, acusan –con razón- de haber iniciado el modelo neoliberal en México. Por eso, hay que decirlo, cuando periodistas locales como el experimentado Gabriel Sánchez Andraca se refieren a Bartlett como parte -desde siempre- “de la corriente nacionalista revolucionaria que prevaleció hasta la llegada de los tecnócratas” en el 82 sólo hacen el ridículo (dicen eso porque están sobreideologizados y confundidos, además de que son priistas. De todos modos, el “nacionalismo revolucionario” tampoco es para presumirse). Secretario de Educación Pública del presidente Carlos Salinas, de 88 a 92 (¡Justifiquen eso! ¿Y cuándo y cómo se encumbró Elba Esther?). Imposible olvidar la elección presidencial del 88 y la “caída del sistema”… Gobernador de Puebla de 93 a 99, periodo en el que se defiende y continúa el régimen autoritario local priista y no se da ningún avance socioeconómico mayor. Ah, y un Secretario de Gobernación del Bartlett gobernador fue… "el precioso" Marín, a quien impulsó a la gubernatura, vía el control del PRI estatal y la alcaldía de la capital poblana.    
Bartlett no hizo ninguna contribución directa y significativa a la democracia desde ninguno de los gobiernos en los que estuvo; después, y hasta hoy, se ha dedicado a intentar seguir siendo poderoso y a “lavar” su paso a la historia. 
*El contenido de este resumen se amplía, detalla, explica y critica en un artículo de próxima publicación.

domingo, 3 de junio de 2012

"Los estudiantes y los priistas"

Una nota publicada hoy por Rogelio Villarreal: http://www.msemanal.com/node/5745

P.D. Ojalá ciertas personas que comentan textos publicados en Internet se tomaran más tiempo para leer, pensar más lo que leyeron y dejar su comentario. Y qué bueno sería que otros   quisieran leer para pensar sobre lo que creen!

viernes, 1 de junio de 2012

Bartlett: colaborador del neoliberalismo

Hace varios años publiqué aquí mismo una nota que resume de cierta manera el currículo político de Manuel Bartlett: http://cratoscopio.blogspot.mx/2009/01/el-cv-de-bartlett.html Si bien no voy a votar por él (ni por nadie que esté compitiendo por las senadurías poblanas), debo decir que, en el debate de ayer, Javier Lozano hizo bien, en más de un sentido, al criticar a Bartlett por hablar como habla hoy pero haber sido lo que llamo "colaborador del neoliberalismo", esto es, colaborador de su iniciador Miguel de la Madrid y de Carlos Salinas. Porque lo fue, como se ve en aquel post, sin que jamás haya "pedido perdón" o criticado el sexenio delamadridista. Pero, claro, hoy es de izquierda, un demócrata, un luchador social, uno de los nuevos héroes de la patria, un pejista.