viernes, 22 de enero de 2010

Me estás oyendo Poniatowska?!

Mensaje del gran Jerzy Lec: “las lágrimas no apagan hogueras”.

lunes, 18 de enero de 2010

Lo dijo Miguel Carbonell

“Si el matrimonio gay va contra la ley de Dios, ¿por qué quieren acudir a la Suprema Corte? Que vayan ante el tribunal divino…”.

miércoles, 13 de enero de 2010

Se suma Mario Vargas Llosa

Vargas Llosa está entre esos pocos literatos, a izquierdas y derechas, que no suelen escribir o decir estupideces sobre política y economía. Este texto suyo (link abajo) es bueno. Lo más relevante es que alguien con su fama y peso a nivel mundial publique algo así. Tiene unas cuantas imprecisiones y desfases, nada grave, por ello no trato eso aquí, no es necesario. Lo que sí anoto es que el siguiente párrafo no es muy fiel a una realidad mexicana, pinta un cuadro que no es del todo exacto ni justo: “Muchos de estos críticos no dicen lo que de veras piensan, porque se trata de algo indecible: que es absurdo declarar una guerra que los cárteles de la droga ya ganaron. Que ellos están aquí para quedarse. Que, no importa cuántos capos y forajidos caigan muertos o presos ni cuántos alijos de cocaína se capturen, la situación sólo empeorará. A los narcos caídos los reemplazarán otros, más jóvenes, más poderosos, mejor armados, más numerosos, que mantendrán operativa una industria que no ha hecho más que extenderse por el mundo desde hace décadas, sin que los reveses que recibe la hieran de manera significativa”. Pero, por ejemplo, prácticamente todos quienes tocamos académicamente, de una forma u otra o en alguna medida, la propuesta de legalización de drogas y además la apoyamos, sí decimos lo que Vargas Llosa dice que es indecible, lo decimos directa y públicamente (y mucho antes que él). Tal parece que escribió ese párrafo para darse más importancia (algo como “les digo algo muy original y soy más valiente que muchos”), y para darle “punch” (fuera de México) al texto. En fin. Lo que verdaderamente importa es que alguien como Vargas Llosa reflexione y se atreva a meterse en el tema, recupere buenos argumentos y los difunda.
Algo más: la legalización de drogas (que no es lo mismo que solamente despenalizar actividades relacionadas, cosa que puede ser un primer paso) no es en sí una propuesta/política neoliberal, no es “el” neoliberalismo ni parte de su programa, aunque en el tema pueda aparecer el neoliberal Milton Friedman (Vargas Llosa lo menciona, lo refiere sin detallar o profundizar). De cualquier forma, Friedman no habló de legalización de drogas como se está haciendo ahora “dominantemente" (enfoque de "harm reduction" ) y como lo hacemos nosotros; para él, el asunto era simple y estrictamente dejar de prohibir y después dejar las cosas sin regulación estatal, mientras que para nosotros es legalizar en el sentido de dejar de prohibir explicitando y especificando en leyes lo necesario y pasar como Estado a regular, a controlar, lo que incluye impuestos, tomando en cuenta derechos y libertades individuales y problemas de salud pública (Friedman era neoliberal, nosotros somos liberales y socialdemócratas). La coincidencia es el no prohibir y el uso respectivo de la palabra “legalización”.


http://www.elpais.com/articulo/opinion/Estado/elpepiopi/20100110elpepiopi_11/Tes
*En México, dos valiosos proponentes de alternativas a la “war on drugs” son el estimado Jorge Hernández Tinajero y Jorge Javier Romero. Recomiendo que le echen un ojo a su trabajo (poblanos: en el número 4 del suplemento que fundé y dirigí, Refectorio, hay textos de ellos; el número está dedicado a legalización de drogas).

lunes, 11 de enero de 2010

Nuevos libros de Rogelio Villarreal

Anuncia Rogelio: “Salieron dos nuevos libros míos: El tamaño del ridículo, publicado por Ediciones Arlequín, y Sensacional de contracultura, por Ediciones Sin Nombre. Pronto estarán en circulación”. Muy bien. Hay que estar pendientes.

*El blog de Rogelio: villarreal.blogspot.com

jueves, 7 de enero de 2010

Del padre del liberalismo moderno

“Es esencialmente repulsiva la idea de una sociedad cohesionada solamente por relaciones y sentimientos que surgen de intereses pecuniarios”. John Stuart Mill.