sábado, 14 de enero de 2012

Enojos y Gracián

“No enojarse nunca es querer ser siempre una bestia”, dijo con mucho tino Baltasar Gracián. O lo que es igual: nunca enojarse, así como pretender nunca enojarse (o aun casi nunca, de ninguna manera), es o ser tonto, o hacerse tonto o hacer posible que te hagan tonto o te traten como si lo fueras -con todo lo que cada una de esas cosas puede implicar, y con las varias relaciones posibles entre ellas....

La ausencia total de enojo es un problema, en no pocos sentidos; como lo es el enojarse siempre o por todo (lo que sea). Y hay tipos de enojo, tipos buenos y tipos malos. Existen, por ejemplo, el enojo racional, el enojo justificado, el enojo razonable, el enojo necesario, y el enojo sano.

Hay que enojarse...

No hay comentarios: